Tras el pepinazo en 2008 de “Iron Will” (el cuarto álbum
de la banda), los suecos GRAND MAGUS editaron dos discos en el que
bajaron, en uno un poco el pie (“Hammer Of The North”) y en el
otro mucho (“The Hunt”), dejándonos a los seguidores de la banda
con una sensación un poco extraña en el cuerpo. Con este “Triumph
And Power”, la banda liderada por el vocalista y guitarrista JB
Christoffersson, vuelve a por sus fueros, con un trabajo que derrocha
fuerza y epicismo casi por cada segundo de duración.
Con portada de Anthony James Roberts (guitarrista de Discharge y
que ha puesto su arte al servicio de bandas como Conan o Slomatics) y
producción de Nico Elgstrand (productor de la banda desde “Hammer
Of The North” y que ha trabajado también con bandas tan dispares
como Gorgoroth o Krux), el disco se nos abre con “On Hooves Of
Gold”, tema con un aura muy épica y que como carta de presentación
está bastante bien escogido, tras el un tema más clásico, “Steel
Versus Steel”, con un estribillo que es puro Heavy Metal. Con
“Figth” volvemos al epicismo (para no volver con semejante
nombrecito), una guitarra pesada, el bajo distorsionado de Fox
Skinner ejerciendo de guía y Ludwig Witt aporreando su set de
batería como un animal. “Triumph And Power”, el tema que da
nombre a la grabación, nos muestra a un JB cantando mejor que nunca,
mostrándonos practicamente todo su amplio registro vocal. El tema
además tiene uno de los mejores estribillos de todo el CD,
acompañado de un solo cojonudo en el que el señor Christoffersson
nos muestra también sus habilidades con las seis cuerdas.
En el tramo central del plástico, un potente inicio de la batería
de Witt nos mete de lleno en “Dominator” posiblemente el corte
más rápido y de los temas más netamente heavys de la grabación.
Tras la tempestad, llega la calma con “Arv”, la primera pieza
acústica del LP, dos minutos de guitarra acústica que nos permiten
coger aire para lo que se avecina, unos coros nos van adentrando en
“Holmgång”, tema con el que casi nos adentramos en la recta
final de este “Triumph And Power”.
Recta final que comienza con “The Naked And The Dead”, otro de
esos temas que se dejan aparcada el aura épica y tienen algo más de
mordiente, tras esta nueva tempestad, otra vez la calma de mano de un
tema instrumental, tranquilito, que nos deje respirar un poco antes
del último golpe de martillo y es que “The Hammer Will Bite”
cierra el disco a lo bestia, con un comienzo muy pausado, pero
evoluciona en un tema que facilmente habría entrado por sus
características en el glorioso “Iron Will”.
Brutal este séptimo álbum de los suecos, que los devuelve por
fin al punto que nunca debieron dejar, por ahora, uno de los discos
que tienen todas las papeletas para estar en mi particular top ten de
favoritos de 2014.
Nota: 8
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